La garantía legal es un derecho clave para proteger a los consumidores cuando los productos adquiridos presentan disconformidades con el producto vendido o no cumplen con las condiciones esperadas. En España, esta garantía está regulada por la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios. En la presente entrada te contamos cómo funciona la garantía en productos nuevos y de segunda mano, de forma clara y sencilla.
Garantía legal para productos nuevos
Los productos nuevos cuentan con una garantía legal de tres años desde su entrega. Durante los dos primeros años, cualquier defecto que surja se presume de origen, salvo que el vendedor demuestre lo contrario. En el tercer año, es el consumidor quien debe probar que el problema ya existía al momento de la compra.
Si el producto presenta un defecto, puedes optar por su reparación o sustitución, salvo que una de estas opciones sea imposible o desproporcionada. Si ninguna de estas alternativas es viable, tienes derecho a solicitar una reducción del precio o la devolución del importe pagado.
Garantía legal para productos de segunda mano
En los productos de segunda mano comprados a vendedores profesionales, el plazo mínimo de garantía es de un año, aunque puede acordarse un plazo menor, pero nunca inferior a ese tiempo. Durante los primeros seis meses, se presume que los defectos detectados ya existían en el momento de la entrega. A partir de ahí, el consumidor debe demostrar que el problema es previo.
Al igual que con los productos nuevos, puedes solicitar la reparación, la sustitución, una reducción del precio o la devolución del dinero. No obstante, debido a las características de los productos de segunda mano, la reparación o una reducción del precio suelen ser las opciones más comunes.
¿Cuándo compro un bien, que garantía tengo?
La garantía legal es la mínima obligatoria para todos los productos, tanto nuevos como de segunda mano.
Existe también la garantía comercial, ofrecida de manera voluntaria por el vendedor o fabricante, que puede ampliar la cobertura o incluir condiciones más favorables, como mayor duración.
Además, está la garantía de conformidad, que asegura que el producto cumple con las características y calidad pactadas en la venta, cubriendo defectos de fabricación y cualquier incumplimiento del contrato.

Si el bien que he comprado presenta defectos, ¿Qué debo hacer?
Para ejercer tus derechos, es fundamental notificar el defecto al vendedor lo antes posible una vez detectado el problema.
Lo recomendable es que estas comunicaciones se lleven a cabo por medios escritos para evitar problemas en un futuro.
Una vez efectuada la reclamación al vendedor, ¿Qué puede ocurrir?
El vendedor está obligado a ofrecer una solución, ya sea la reparación, sustitución, reducción del precio o devolución del dinero, según lo que corresponda. El proceso debe ser gratuito y realizarse dentro de un plazo razonable incluyendo los gastos de envío y mano de obra, causando las menores molestias posibles.
Conclusión
La normativa española protege a los consumidores tanto en la compra de productos nuevos como de segunda mano. Conocer tus derechos te permitirá disfrutar de una mayor tranquilidad y exigir las soluciones adecuadas en caso de problemas con tus compras.
En el caso de dudas, o de que no estén respectando tus derechos te animamos a que te pongas en contacto con nosotros como especialistas en esta materia.
En Ana Beorlegui Abogada en Pamplona, te asesoramos sobre tus derechos como consumidor protegiendo tus intereses. Contáctenos hoy para una consulta personalizada.